Creamos
nuestra realidad en forma permanente
sin tener plena consciencia de ello. La física cuántica establece que todo es
energía y que no hay diferencia entre materia y energía. Es por esto, que un
objeto o un cuadro puede emitir un Chi (energía vital) beneficioso, pero si la
imagen es hostil o está en desarmonía, puede enviar esa desarmonía a nuestro
entorno.
De igual
manera, nuestros pensamientos negativos, inseguridades o temores podrían
impregnar el ambiente de energía desestabilizantes.
La limpieza
del campo etérico tanto de las casas como de las personas , conociendo qué tipo
de energías interactúan con nosotros y cómo se instalan en nuestro campo
electromagnético, es de vital importancia para mantener nuestro hogar en armonía
Según el
estado en que nos encontramos energéticamente, podemos sentirnos irritables,
cansados, deprimidos o apáticos, dispersos o con energía baja; es decir, así como esta nuestro campo
energético está nuestra mente y nuestras emociones.
Es importante
reconocer que cualquier sintomatología en el cuerpo tiene un estadio previo de
contaminación en los campos electromagnéticos dimensionales y áuricos de las
personas. Luego de un tiempo, estas energías inciden en nuestra forma de pensar
y en las emociones en nuestro físico.
Un exceso de
aparotología que emita radiaciones ionizantes, como por ejemplo computadoras,
impresoras o aires acondicionados, podría generar un espacio difícil si es que
no se abren las ventanas y se deja entrar la energía solar para nivelar los
iones.
A veces,
encontrarnos con personas contaminadas energéticamente puede dejarnos una
sensación de malestar en el espacio que nos rodea, expresada por olores
desagradables, dolores de cabeza, opresión en el pecho, cansancio y a lo que
habitualmente se le atribuye como mala onda: es solo una consecuencia de que la
persona que no posee hábitos de limpieza energética.
Existen
formas de relacionarnos energéticamente con otras personas que son muy similares
a las de la vida diaria. Habrá quienes son generosos y otros que son captadores
de energía, causando un agotamiento excesivo a la persona que se le está
restando la energía (por ejemplo: en una charla, en el trabajo o en el hogar).
Si bien, estas reacciones energéticas son inconscientes, existen técnicas para
frenar esa fuga de energía.
Los lugares con alfombras, paredes enteladas o sótanos, son los más propicios para acumular energía, deben mantenerse limpios y sin polvo.
Los lugares con alfombras, paredes enteladas o sótanos, son los más propicios para acumular energía, deben mantenerse limpios y sin polvo.
En las
oficinas, cuando estas energías se acumulan pueden producir un desequilibrio que
tenga como consecuencia enfermedades, irritabilidad o mucho cansancio en los que
trabajan ene le lugar. Para solucionar esto, es necesario conocer el origen y
solucionarlo limpiando los espacios, pero si partimos de la base de que los
pensamientos son posibles creadores de desarmonías, si los dirigimos
positivamente podrán armonizar nuestros campos entéricos en todos sus niveles.
Activar protecciones energéticas con ejercicios de visualización creativa y consolidar el campo áurico es forma de mantenernos en armonía.